Nota de prensa en Radio Futuro publicada el 12 de agosto de 2025
Por Catalina Reyes
En un nuevo programa de Palabra Que es Noticia, Andrea Moletto conversó con Benjamín Sáez, investigador de Fundación SOL, sobre el mercado laboral y las cifras del salario promedio entregadas por el INE.
Brecha de género e informalidad
Según Sáez, la brecha salarial de género se mantiene como un problema estructural: mientras la mediana de ingresos de los hombres es de $698.000, la de las mujeres es de $555.000, un 25% menos. Se trataría de “una discriminación salarial, que no tiene ninguna otra explicación que el hecho de ser mujer”, y que persiste incluso en sectores fuertemente feminizados.
El mercado laboral también presenta un alto nivel de informalidad, que bordea el 27% y se mantiene estable en el tiempo. En promedio, los trabajadores informales ganarían cerca de $400.000. “Aquí se dan situaciones combinadas, no hay una relación 100% entre informalidad y remuneración, aunque tiende a darse muchas veces, porque el mundo informal es un mundo muy diverso”, explicó.
Sáez advirtió que la fragmentación sindical y las limitaciones legales impiden que la negociación colectiva tenga un alcance significativo, sobre todo para superar la brecha de género salarial:
“Esta encuesta permite observar por primera vez que, efectivamente, los trabajadores que están sindicalizados tienen mejores salarios, no les permite subir su salario. Sin embargo, a nivel general, como es tan pequeño este grupo que tiene esa posibilidad de negociar colectivamente y de aumentar su remuneración, finalmente, a nivel agregado lo que vemos es una realidad de salarios que se acerca a lo que es el salario mínimo. Por eso eso también es una discusión relevante, porque el salario mínimo genera un “efecto faro” que, de una u otra manera, guía al resto de salarios de la economía”, explicó.
Ingresos y deudas
Un hogar promedio de tres personas en una capital regional gastaría más de $1.700.000 mensuales, según datos actualizados al 2025. Los principales gastos corresponden a alimentación (20%), vivienda y energía (15%-16%), transporte (15%-16%), salud (8%) y comunicación (6,7%), sumando el 67% del presupuesto.
El desajuste entre ingresos y gastos se refleja en que solo el 20% más rico de los hogares tiene ingresos superiores a sus gastos:
“En el 80% de los hogares, los gastos del hogar son superiores a sus ingresos. Por lo tanto, hay una deuda estructural que se reflejó, por ejemplo, en los retiros. Muchas personas, en lugar de utilizar este dinero para compras, gran parte destinó estos recursos al pago de deudas de forma directa”, señaló. Actualmente, más de cuatro millones de personas están morosas en Chile.
Las personas que no estudian ni trabajan
El investigador también comentó el aumento de jóvenes que no estudian ni trabajan, conocidos como “ninis”. En el último año, esta población llegó a 336.000 personas, con 173.000 mujeres y 162.000 hombres.
Al respecto, Sáez señaló que es importante resaltar que “estas personas, no están todas “haciendo nada”. Muchas de ellas, el 33%, están buscando empleo (…) Hay más de 727 mil personas, entre 12 y 24 años, que realizan trabajo no remunerado de cuidados. Estamos hablando de 430 mil mujeres que realizan este trabajo. Es importante revelar que existe este trabajo, que es invisibilizado, y que probablemente muchas de estas personas lo están realizando”, apuntó.
Para Sáez, las cifras reflejarían estancamiento salarial y precariedad: “Con estos montos, es muy difícil que una persona pueda sacar a un hogar promedio de tres personas de la pobreza”, advirtió.