Publicada en Diario Financiero el 11 de enero de 2023

El investigador del organismo, Marco Kremerman, dijo que les preocupa el mantenimiento de la capitalización. También instó al gobierno a abrir las bases de datos a los centros de estudio. 

Por Cecilia Arroyo

El investigador del área de institucionalidad y desarrollo de Fundación SOL, Marco Kremerman, expuso este martes ante la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados, con una visión crítica de la reforma de pensiones del Ejecutivo. "Nos parece importante destacar que no se sale de la tipología mezquina que tiene el actual sistema de pensiones chileno o extremo, como ha mencionado el Gobierno actual, y pasaríamos a tener un sistema mixto con algo que no es común a nivel mundial y con un pilar dominante de cuenta individual", dijo ante los parlamentarios el economista de la entidad, cuyos planteamientos a favor de un sistema de pensiones de reparto han sido compartidos por parte importante del gobierno de Gabriel Boric. 

"Entonces este sería un sistema mini mixto, donde gran parte de la cotización se destina a cuentas individuales y el componente de solidaridad intergeneracional nunca va a superar el 35% del Fondo Integral de Pensiones y converge al 0% en el largo plazo. Vale decir, en el largo plazo este sistema no va a tener solidaridad intergeneracional, lo que se conoce como reparto, lo cual nos parece preocupante", expuso. 

Kremerman continuó su crítica indicando que en el proyecto "sigue existiendo dominancia del objetivo secundario, desde nuestro punto de vista, que es fortalecer el mercado de capitales". "El objetivo central de un sistema de pensiones es pagar buenas pensiones. De hecho se estima -en régimen-, que el sistema en su conjunto acumularía una capitalización colectiva o individual superior a 135% del PIB. Parece que es un exceso, dado que una parte importante de ese monto se puede utilizar para pagar pensiones", añadió.   

"Para nosotros, las cuentas individuales como estructura central de pensiones son inviables actualmente. Tenemos una cosa muy extraña, un sistema privado subsidiado por el Estado. Hoy día de cada $100 que se pagan en pensiones en Chile, incluyendo pensiones civiles, fuerzas armadas, subsidios y otros pagos previsionales, solo $18 provienen de pensiones autofinanciadas (AFP y Compañías de Seguros) y $82 del Estado (...) Básicamente lo que tenemos es una especie de sistema de reparto encubierto, pero sin seguridad social, sin garantías, sin beneficios definidos entonces, perfectamente, con los bajos salarios que existen en Chile, con las lagunas previsionales, los flujos permanentemente han sobrado para pagar mejores pensiones de lo que se pagan actualmente, incluso en el futuro", seguró.  

Repensar la PGU

Incluso apuntó al tema de las tasas de reemplazo y suficiencia de las pensiones. "Falta definir un objetivo más preciso en relación al monto de las pensiones pagadas. Nos parece que en ese objetivo preciso donde el Gobierno da un avance en relación a propuestas de gobiernos anteriores, debe tener una combinación entre tasas de reemplazo y criterios objetivos de suficiencia (...) La línea de la pobreza como línea de sobrevivencia, de ninguna manera es una pensión suficiente, puntualizó. 

En ese marco, el economista resaltó además que es importante "repensar el rol de la Pensión Garantizada Universal como piso mínimo, más que como aporte complementario integral casi a todo evento (...) Nos parece que, dada la restricción de recursos públicos, hubiese sido mucho más provechoso ir en la línea del Pilar Solidario, vale decir, tener un monto mucho más alto (como mínimo) que nadie este por debajo de ese valor, pero no necesariamente pagar a todas las personas que cumplan 65 años, la PGU completa", remarcó. 

Por último, Kremerman recalcó que "es necesario conocer cuál es la fórmula de cálculo de la pensión nocional. Sabemos cómo se calculan las pensiones con cuentas individuales, pero no sabemos exactamente cuál va a ser la fórmula para el cálculo de la pensión nocional del 6%", indicó. A ello agregó que "se espera que el Gobierno pueda compartir con los centros de estudio, con los investigadores en general, los datos que utilizó para construir este proyecto de ley y los informes complementarios.