Publicado en El Mostrador
Investigación de la Fundación Sol apunta a uno de los grandes ausentes en la iniciativa impulsada por el Gobierno y que no cuenta con piso para incluirse en la discusión. Según el estudio, que analiza datos de los países con mayor productividad de la OCDE, en todos ellos existe la negociación por rama en algún grado, lo que claramente no ha afectado sus economías. Además, en los países más igualitarios de la OCDE, la negociación por rama está presente.
Un nuevo avance en su tramitación, alcanzó este miércoles una de las reformas emblemáticas del Gobierno de Michelle Bachelet, cuando la Comisión de Trabajo del Senado aprobó en general la idea de legislar la Reforma Laboral. Ahora la iniciativa deberá ser ratificada en general en Sala, para luego recibir indicaciones.
Según fuentes ligadas a la Nueva Mayoría, y pese a que en el cónclave gubernamental realizado el lunes pasado “no hubo señales de morigerar la reforma”, el mayor temor entre los parlamentarios oficialistas en torno a que se termine cediendo en aspectos importantes durante su tramitación en la Cámara Alta, apuntan hacia el propio Gobierno. Especialmente a la cartera de Hacienda, liderada por Rodrigo Valdés, que el mismo miércoles señalaba que, si bien esta es una reforma importante, “no veo la misma disposición para buscar equilibrios en otros temas. Queremos un derecho a huelga efectivo, pero tenemos que cautelar siempre que ese derecho a huelga sea proporcional con los efectos que tiene en otros sectores, entre ellos las empresas”.
En todo caso, un punto que ya está absolutamente fuera de discusión y que no será parte de esta reforma, es la negociación ramal. Así lo admiten varios parlamentarios que, pese a estar de acuerdo en la necesidad de que esta sea considerada, descartan de plano que haya piso para incluirla. De hecho, ni siquiera estuvo incorporada en la propuesta original enviada por el Ejecutivo en diciembre pasado.
Los motivos entregados para no incluir el tema partieron bajo el argumento de que era inconstitucional, justificación que fue perdiendo fuerza. Pero quien le puso la lápida definitiva a este tipo de negociación fue el líder de Hacienda, que a mediados de junio y a poco más de un mes de haber asumido la cartera, señalaba que “Chile aún no está preparado para la negociación por rama”.
Lo cierto es que la negociación por rama es una idea que históricamente ha sacado ronchas en el mundo empresarial –mirada compartida desde la Alianza y algunos sectores de la Nueva Mayoría– pese a que en Chile, hasta antes del Plan Laboral de 1979 de José Piñera, la ley establecía la posibilidad de este tipo de negociaciones. Luego de esto, hace ya 36 años, esta opción desapareció del país.
La investigación “Negociación Colectiva por Sector Económico: Productividad, empleo y Desigualdad. Un análisis Comparado”, realizada por el economista Gonzalo Durán, señala que la “evidencia comparada muestra que en aquellos países donde existen sistemas de negociación colectiva por rama de actividad económica, no es posible colegir incompatibilidad con elevados estándares económicos”.