Publicado en The Clinic 30/07/2019
Según los datos arrojados por la investigación, ocho de cada 10 nuevos pensionados en Chile no alcanza a autofinanciar una pensión superior a la línea de la pobreza. El caso en las mujeres es más dramático, ya que la mitad recibirá una pensión inferior a los 24 mil pesos.
Como resultados “concluyentes y desastrosos” calificó la Fundación Sol los que arrojó un estudio que analiza a la primera generación que ha cotizado íntegramente bajo la lógica de las cuentas individuales en las AFP.
Según la investigación “Pensiones bajo el mínimo: Resultados del sistema de capitalización individual en Chile”, en los últimos 10 años, el sistema de AFP y compañías de seguro ha duplicado el número de pensiones de vejez pagadas, finalizando el 2018 con más de 900 mil.
A diciembre de 2018, el 50% de las 684 mil jubilados que recibieron una pensión de vejez por edad (la modalidad de pensión más masiva) obtuvieron menos de 151 mil pesos (135 mil pesos si no se incluyera el Aporte Previsional Solidario del Estado). Incluso, en el tramo de aquellas personas que cotizaron entre 30 y 35 años, el 50% recibió una pensión menor a 296.332 pesos, valor levemente superior al salario mínimo de fines de 2018, pero inferior al salario mínimo actual.
El investigador Marco Kremerman detalló que “esta grave crisis previsional, se acentúa en el caso de las mujeres, ya que el 50% de las 394.643 jubiladas por vejez edad, recibe una pensión menor a 138 mil pesos (107 mil pesos si no se incluyera el Aporte Previsional Solidario del Estado), y la pensión mediana para quienes cotizaron entre 30 y 35 años, vale decir, casi toda una vida laboral, que llega a sólo 281.722 pesos”.
En la misma línea, el investigador Recaredo Gálvez sostuvo que “a nivel regional, si analizamos los datos de las pensiones de vejez edad pagadas por las AFP (retiro programado y rentas temporales), se puede concluir que la pensión mediana en todas los territorios del país es inferior a la línea de pobreza para hogares unipersonales y en ninguna región supera el 50% del salario mínimo. Si se toman los montos promedios, se observa que sólo en la Región Metropolitana, las pensiones superan los 200 mil pesos. Las regiones donde se registran los valores más bajos corresponde a Aysén, O’Higgins, Araucanía, Ñuble y Los Lagos”.
La realidad de los nuevos pensionados es aún más crítica. El 50% de las 125 mil personas que se pensionaron durante el año 2018, a través de su ahorro y la rentabilidad conseguida por las AFP, sólo lograron autofinanciar una pensión menor a 48 mil pesos.
Por otro lado, el 50% de las personas que cotizaron entre 30 y 35 años en su vida laboral, pudieron autofinanciar una pensión menor a 246 mil pesos, monto que equivale a 85% del Salario Mínimo a diciembre de 2018.
Nuevamente, el panorama para las mujeres es más precario, ya que el 50% de las 71.472 nuevas pensionadas, pudo autofinanciar una pensión menor a 24 mil pesos y la mitad de las mujeres que cotizaron entre 30 y 35 años, lograron autofinanciar una pensión menor a 216 mil pesos, monto que equivale a 75% del Salario Mínimo a diciembre de 2018.
“En síntesis, ocho de cada 10 nuevos pensionados en Chile, ni siquiera logra autofinanciar una pensión superior a la línea de la pobreza, lo cual demuestra que el sistema de cuentas individuales administrado por las AFP fracasó, ya que después de casi cuarenta años de funcionamiento, no logró cumplir el objetivo fundamental para cualquier sistema de pensiones en el mundo: pagar pensiones suficientes”, agrega Kremerman.