Publicada en Radio Universidad de Chile el 30 de enero 2023
Francisca Barriga, economista de la entidad, analizó parte de los resultados de la Encuesta Nacional de Empleo del INE, y mostró preocupación por la calidad de los empleos que se han creado desde el peor momento de la pandemia, hasta ahora.
Por Fernanda Araneda
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) publicó los resultados de la Encuesta Nacional de Empleo, y dio a conocer, entre otros datos, que la tasa de desocupación en nuestro país alcanzó el 7,9% durante el último trimestre de 2022.
Para analizar los resultados de la encuesta, Diario y Radio Universidad de Chile conversó con la economista e investigadora de Fundación Sol, Francisca Barriga, quien, precisamente, partió refiriéndose a la tasa de desocupación.
Según Barriga, ese resultado en particular demuestra el estancamiento en el mercado laboral de nuestro país.
“Este estancamiento en la recuperación de empleos se ve en que aún no llegamos a los niveles nacionales de pre pandemia. Si vemos particularmente cuántos empleos faltan, vemos que necesitamos más de 490 mil nuevos empleos para recuperar recién el nivel que pudimos observar en el trimestre de octubre a diciembre del año 2019”, señaló la economista.
Otro preocupación de Barriga es la calidad de los nuevos empleos. La investigadora de Fundación Sol hizo énfasis en que solo el 3,3% de ellos corresponden a “empleos protegidos”.
“De los nuevos empleos creados desde el peor momento de la pandemia hasta ahora, solo el 3,3% son protegidos. ¿Qué significa esto? Que cuenta con contrato escrito, cotizaciones, previsión de salud, derecho a vacaciones, licencias pagadas, derecho a guardería, permiso por maternidad y seguro de cesantía. Es decir, cumple con todas las disposiciones formales, pero no necesariamente asegura un empleo de calidad”, indicó Barriga.
“Acá no estamos hablando de suficiencia de salarios, no estamos hablando de que la persona esté protegida o protegido por un contrato colectivo, ni otros elementos que pueden de alguna manera asegurar calidad, sino que acá estamos hablando de las disposiciones formales, y solamente vemos que el 3,3% de ellas, cumple con esta categoría”, agregó.
Barriga además mencionó otro índice que también permite analizar el mercado laboral chileno. De acuerdo a la investigadora hay que poner atención a la “tasa de subutilización de la fuerza de trabajo”, es decir, aquella que incluye a las personas que estaban buscando trabajo pero se desalentaron, y también a aquellos que tienen empleo, pero están disponibles para trabajar más horas.
“Si vemos a todas estas personas que tienen problemas de desempleo total, parcial o potencial, vemos que son más de 2 millones de personas, y eso corresponde a una tasa de subempleo de la fuerza de trabajo de un 20,1%”, explicó Barriga.
Finalmente, la investigadora aseguró que “las tendencias estructurales se han tendido a reforzar”.
“Esto porque el énfasis de la recuperación no ha estado puesta en empleos de calidad, en empleos que puedan proyectarse a mediano y largo plazo, sino que se ha basado principalmente en empleos informales, y empleos endebles que nos llevan a que haya un estancamiento en el mercado laboral”, aseveró.