Publicado en Diario UChile el 30 de abril de 2017
Salvo contadas excepciones, el primero de mayo es reconocido en todo el mundo como el “Día internacional de los trabajadores”. La fecha se estableció en conmemoración del 1 de mayo de 1886, momento en que se iniciaron las revueltas de Haymarket en Chicago, Estados Unidos.
Por esos días, los trabajadores se encontraban luchando por una jornada de trabajo de 8 horas, que permitiera destinar la misma cantidad de tiempo a dormir y a “vivir”.
En ese contexto ocho trabajadores anarquistas fueron acusados injustamente de lanzar una bomba a la policía. De ellos, cinco fueron condenados posteriormente a muerte, y los otros tres a presidio.
A 131 años del conflicto que inició lo que posteriormente se conoció como los “Mártires de Chicago”, Chile se prepara para un nuevo primero de mayo, en el marco de un año de elecciones presidenciales y de entrada en vigencia de la Reforma Laboral, uno de los proyectos emblemáticos del mandato de la Presidenta Michelle Bachelet.
En este escenario, Diario y Radio Universidad de Chile conversó con un historiador, un abogado y una socióloga, todos expertos en el ámbito laboral, sobre las condiciones que marcan trabajo en el país. El diagnóstico fue claro: precarización, retrocesos, una reforma que profundiza las contradicciones y una CUT en deuda, incapaz de liderar el movimiento de trabajadores.